LUCIA DE FÁTIMA – EL CUMPLIMENTO DE LA ÚLTIMA PROFECIA.

Saludos Emanuel y Pastora, yo soy Lucia aquella niña de sus tiempos que se presentara.

Un gran amor nos invadió a todos con la presencia de la Madre, toda su luz, su energía entró en nuestros cuerpos. Hubo una gran activación en nuestro ser.

Hoy vengo no para hablar de aquellos tiempos, sino de los nuevos tiempos, de las Profecías como llaman, que la Madre nos dio en aquellos tiempos, que ahora es el momento planetario para que esta última profecía tan resguardada, tan custodiada por la iglesia católica deba cumplirse.

Ahora es el momento.

Ha llegado el momento de su cumplimento y las profecías están hechas para cumplirse.

No es para no cumplirse, porque los seres de luz, como la Madre, ven más allá de cualquier línea de tiempo o de cualquier espacio tiempo y estemos en la línea de tiempo que estemos, esta profecía se tendrá que cumplir, esta profecía del final de estos tiempos.

El final de la iglesia católica, el final de todas conspiraciones, de todo este gobierno mundial que mantuvo en vilo a toda esta humanidad. Se cumplen, se cumplen todas estas aflicciones, se cumplen todas estas profecías que la Madre nos diera.

Madre Fátima ha hablado también a través de otros y a través de ustedes Emanuel y Pastora de este momento planetario tan importante.

Yo vengo como res guardadora, como la Madre me dio esa profecía.

Esa profecía la doy a conocer en este final de los tiempos. Todo se cumple, todo llega a su final de ciclo.

Todo lo que conocemos de este planeta ya no estará más.

Todas las instituciones perversas de control, que infundieron tanto miedo y daño a esta humanidad, serán destruidas, pasarán al Gran Fuego y se quemarán.

El planeta rugirá y rugirá sí, pero para bien, para un nuevo planeta de mayor altura vibracional y de mayor luz.

Vengo a dar la cara, a poner mi palabra.

Muchos han tratado de tergiversar la profecía, de acomodarla a sus conveniencias, a sus fines, a sus intereses.

Pero lo que la Madre dijo habrá de cumplirse, porque ella es la Gran Rectora de este proceso de ascensión, de transformación junto con todo el equipo.

Que nadie se confunda, que nadie busque explicaciones huecas de estas profecías, de esta tercera y última profecía, porque ya se cierra todo este ciclo en el planeta y con él se cierran todas las profecías que se han dado.

Bien decía el Maestro, no quedará piedra sobre piedra.

El vaticano se desmoronará, toda su estructura caerá, todo lo que tienen debajo de la estructura su podrición saldrá.

Todas sus fechorías, toda la maldad, vestidos de oveja, pero por dentro lobos rapaces.

Todo se tiene que cumplir, se cumplirá, escrito está, así a de ser y así será.

Yo me despido, soy Lucia y los bendigo a todos.

Yo soy Lucia, soy una de las Estrellas de María,

estoy siempre al lado de ella, gozo de su gran compañía.
Emanuel y Pastora – ServiUM